López Obrador reivindica las culturas prehispánicas de México en su segundo Grito en solitario

Otro Grito solitario en un Zócalo, una vez más, vacío. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha conmemorado la noche de este miércoles el comienzo de la independencia acompañado de su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, miembros del Gobierno y unas decenas de invitados especiales. De nuevo, sin el calor de los asistentes, que se congregaron en algunos accesos de la plaza, especialmente en la calle de Madero, pidiendo entrar.

Frente al balcón central del Palacio Nacional, un Zócalo vallado y un perímetro de seguridad para evitar aglomeraciones y contagios por coronavirus. Otro Grito para las cámaras de televisión, en silencio. El mandatario incluyó en la fórmula habitual unas palabras de homenaje entre sus veinte vivas. “Viva la honestidad”, “los héroes anónimos” y “vivan las culturas del México prehispánico”, una reivindicación y una declaración de intenciones en línea con su discurso político.

El acto se celebraba, según había anunciado el Ejecutivo, “en memoria de las heroínas y héroes” que pusieron fin a la conquista. “Se conmemora el 211º Aniversario del Grito de Independencia por la libertad y la justicia”, era el lema la noche. López Obrador reunió este año tres acontecimientos históricos: los 700 años de la fundación de Tenochtitlan -forzando unos años el aniversario- , los cinco siglos de la invasión y dos de la independencia, cuyos festejos culminarán el próximo 27 de septiembre.

Ya con ocasión de las actividades conmemorativas de la caída de la capital de la civilización azteca, hace un mes, la festividad se convirtió en una exaltación de la “resistencia indígena” como alternativa al recuerdo de lo que los dirigentes de la Cuarta Transformación, el proyecto político obradorista, suelen definir como la “mal llamada conquista”.

El corazón de la Ciudad de México, donde las autoridades levantaron una réplica de más de 15 metros de altura del Templo Mayor, el eje simbólico del universo para los mexicas, estaba adornado con motivos prehispánicos. “Este grito representa mucho”, recalcó el presidente en la víspera, rebajando el hecho de que por segunda vez la celebración, la tercera de su mandato, no fuera pública. “Les aseguro que en sus casas la mayoría de los mexicanos va a poder participar, va a poder advertir todo lo que se va a hacer, el programa, todo completo”.

Vía | El País

Sé el primero en comentar

Déjanos un comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada.


*