Las monarquías más antiguas del mundo que aún persisten

La que podría llamarse la monarquía más antigua del mundo empezará una nueva era este miércoles.

Las monarquías, aunque parecen ser formas de gobierno de siglos atrás, aún están fuertemente arraigadas a las estructuras sociales, aunque ahora simplemente simbolicen la unidad de las naciones donde residen.

Por esta razón, cuando el emperador Akihito, de Japón, abdicó este martes 30 de abril, se reconoció que la era Heisei ha llegado a su fin. 

Esto dará inicio a una nueva era llamada Reiwa (orden y armonía), cuando su hijo Naruhito se convierta oficialmente en el 126° emperador de Japón.

Akihito fue el primer ocupante del Trono de Crisantemo, como se le llama al título en Japón, en abdicar a su cargo en casi 200 años.

La historia de la realeza de Japón se remonta varios siglos en el tiempo, como la de otras casas reales que aún existen y son altamente veneradas al rededor del mundo.

A continuación, presentamos una lista de las monarquías más antiguas del planeta que continúan su reinado.

7. Suecia

El origen de la monarquía sueca tiene una historia que se remonta mil años atrás.

Los actuales reyes de Suecia son Carlos XVI Gustavo y Silvia. En este país, la familia real es un símbolo unificador de la nación, aunque se gobierna a través de una democracia parlamentaria.

6. Dinamarca

La monarquía danesa puede rastrearse hasta el siglo X, cuando reinaron Gorm El Viejo, nacido cerca del año 900, y Harald Bluetooth, nacido cuarenta años después.

Margarita II, la actual reina, y su familia desempeñan un papel simbólico y funciones representativas dentro y fuera del país europeo. Sin embargo, el gobierno también es una democracia parlamentaria.

5. Noruega

La fecha de inicio de la monarquía en Noruega está fijada en el año 885, cuando Harald Fairhair, considerado el primer rey noruego, unió los actuales territorios que conforman la nación.

Desde 1905, la Casa Glücksburg ocupa el trono noruego y actualmente los monarcas son el Rey Harald y la Reina Sonia.

Hoy en día, Noruega se define como una monarquía constitucional en la que los nobles cumplen solo funciones representativas y ceremoniales.

4. Reino Unido

La monarquía británica tiene sus inicios en los reinados sajones y rastrea sus inicios hasta el Egbert, título del rey de Wessex entre los años 802 y 839.

Egbert es considerado como el más poderoso de los gobernantes en esa época, cuyo reinado abarca los territorios de la actual Inglaterra.

Una sucesión de monarcas ocurrió hasta que a inicios del siglo XVIII, Inglaterra y Escocia se unieron en el Reino de la Gran Bretaña.

El país actualmente es una monarquía parlamentaria y ni la reina Isabel II ni sus familiares tienen poderes de decisión sobre políticas públicas.

3. Camboya

Los historiadores sitúan el nacimiento de la monarquía en Camboya en el año 802 , cuando Jayavarman II se convirtió en rey.

A este monarca se le considera como el fundador del imperio jemer o camboyano, del cual el actual país de Camboya es considerado como heredero.

El rey constitucional y vitalicio de Camboya es Norodom Sihamoní, aunque el país también cuenta con un primer ministro.

Un consejo real elige a los monarcas entre los varones mayores de 30 años descendientes de la dinastía Norodom.

2. Marruecos

La primera dinastía que reinó en el actual territorio de Marruecos fue conocida como Idris.

El rey Idris I gobernó entre el año 789 y 791, después de conquistar el territorio de un grupo de tribus bereberes.

Su hijo, Idris II, fundó Fez, una de las principales ciudades del Marruecos actual. Después, distintas dinastías sucedieron el trono.

El actual rey de Marruecos es Mohammed VI, quien no tiene poderes de decisión sobre política pública, pues el país opera como una monarquía constitucional.

1. Japón

Según la leyenda, la monarquía de Japón existe desde aproximadamente el año 600 a.C., cuando Jimmu, hijo de Ameterasu, la diosa del sol, se convirtió en emperador.

Los emperadores posteriores mantuvieron la tradición de llamarse descendientes de Amaterasu y por lo tanto, tener un estatus de divinidad.

Sin embargo, fue el emperador Hirohito, padre de Akihito, quien fue forzado a renunciar públicamente a su divinidad al final de la Segunda Guerra Mundial como parte de la rendición de Japón ante los Aliados.

Según la Constitución de posguerra de Japón, el emperador no es el jefe de Estado del país, sino un “símbolo del Estado y la unidad del pueblo”.

El que gobierna Japón en la actualidad es el primer ministro, cargo que actualmente ocupa Shinzo Abe.

Con información de BBC Mundo

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