La Noche de Rábanos es un concurso y exhibición esperada cada año, por todos los oaxaqueños, pero también por el turismo nacional e internacional que viaja a este maravilloso destino en las épocas decembrinas.
Cada 23 de diciembre la ciudad de Oaxaca se viste de celebración, con las majestuosas creaciones que realizan hortelanos y floricultores, que con gran talento artístico elaboran diversos diseños hechos en rábanos, en la flor inmortal y en hoja de maíz, también conocida como totomoxtle.
La fiesta de la Noche de Rábanos comienza en la tarde y dura algunas horas, donde familias se congregan para admirar obras de arte inspiradas en las fiestas navideñas junto a un gran ambiente de música y gastronomía típica de Oaxaca.
Raíces prehispánicas
Los orígenes de esta celebración están en el antiguo Mercado de Vigilia de Noche Buena. En ese lugar se vendían las hortalizas, las hierbas de olor, las flores, las frutas y el pescado seco que se consumían en la comida o en la cena navideña en la ciudad de Oaxaca y sus alrededores. A lo largo de 122 años debió superar algunas vicisitudes que la fortalecieron. Sus raíces prehispánicas, se fueron sumando a las costumbres españolas y a prácticas más modernas y hoy es una tradición consolidada y fuerte.
La primera exposición de rábanos data de 1875, organizada por la Sociedad Mutualista de Artesanos. Para 1889 se realizó una exposición de flores de “La Plaza de la vigilia Navideña” en el periodo del Presidente Municipal: Francisco Vasconcelos, la cual es considerada como la primera edición en forma de la Noche de Rábanos, ahí floricultores y hortelanos provenientes de Trinidad de las Huertas y del Barrio de la Defensa exponían sus productos con la finalidad de atraer la atención de consumidores por medio de figuras y esculturas labradas en el tubérculo.
En 1922, se acuñó el nombre actual en una noche de paseo para admirar las artísticas combinaciones de horticultores.
Vía | Radio Formula
Sé el primero en comentar