El Atlas vuela rumbo a la gloria: gana 2-0 al Pachuca y siente en las sienes la corona del bicampeonato

GUADALAJARA, Jal., 26 de mayo de 2022.- Atlas dio un paso sólido rumbo a la gloria. El bicampeonato, algo que sólo dos equipos han logrado en la era de los torneos cortos, está a sólo 90 minutos de distancia.

Los Zorros vencieron por 2-0 al Pachuca, en la Ida de la Gran Final del Clausura 2022 y ahora sólo una tragedia podría arrebatarle la copa. Tras 70 años de sequía, la escuadra Rojinegra vive ahora una época dorada.

Todo o nada. Con la gloria en juego, los equipos saltaron a la cancha del Estadio Jalisco en busca de alcanzarla. El juego comenzó tenso, con pocas oportunidades. Los Zorros tenían más tiempo el esférico. Pero los Tuzos avisaron primero, con un tiro libre de Víctor el Pocho Guzmán, que se estrelló en la barrera, al ‘20.

El encuentro se abrió con una estupenda conexión. Luis Reyes, ahora habilitado por el centro, abrió hacia la derecha para José Javier Abella. El Hueso picó de inmediato al espacio.

El lateral derecho devolvió con un toque de primera. Estupendo servicio templado. La fuerza que Reyes llevaba en la carrera y en el salto, se la imprimió al remate. Sólido cabezazo que superó el lance de Oscar Ustari. El Jalisco explotó con el 1-0 del Atlas, al ‘26.

La escuadra local vivía un mejor momento y sabía lo importante que era sacar una buena ventaja. Por eso, no dejaba de insistir. Julián Quiñones se encontró la pelota en el área. Oscar Ustari achicó y le desvió el remate a tiro de esquina. En el lanzamiento desde el banderín, a primer poste, el propio atacante colombiano ganó y cabeceó cruzado. La redonda pasó apenas por un costado, al ‘33.

Pachuca reaccionó en la recta final del primer tiempo. Kevin Álvarez fue la constante vía de acceso por la derecha. Al ‘38, picó a la espalda de la defensa. Alcanzó el pase filtrado. Podía centrar, pero prefirió disparar con fuerza a primer poste. Camilo Vargas desvió a tiro de esquina. Fue la primera intervención importante del colombiano.

Ya en el tiempo agregado, Kevin Álvarez recibió dentro del área un centro pasado. Bajó la redonda y remató fuerte. Camilo Vargas desvió para quitarle velocidad al disparo. Martín Nervo complementó para alejar el peligro. Instantes después, Víctor Guzmán alcanzó un balón en la orilla del área chica. Cabeceó cruzado y el arquero rojinegro desvió sobre la línea para salvar a su equipo.

Al descanso, Atlas se fue con la ventaja mínima. Y en el arranque del complemento, intentó incrementar el marcador para acrecentar la ilusión de probar nuevamente la gloria. Al ‘52, Julio Furch estiró la pierna dentro del área y logró rematar, pero pego en las redes por fuera. Tres minutos después, Aldo Rocha prendió un rechace, que se fue apenas por encima de la portería.

Los Tuzos mejoraron con las modificaciones ordenadas por el técnico Guillermo Almada. El líder de la fase se lanzó en busca de la igualada. Al ‘66, Víctor Guzmán remató un centro pasado a segundo pase. El cabezazo fue picado y complicado. Camilo Vargas se tendió y atrapó. Otra buena atajada del colombiano.

Dos minutos más tarde, vino la más clara para el conjunto visitante. Kevin Álvarez recibió dentro del área y quedó de frente al guardameta. Definió con un disparo raso que buscaba la base del poste, pero increíblemente pasó a centímetros del poste. Perdonó. Y nada es más costoso en el futbol que eso. Terminó pagando.

Pachuca estaba volcado al frente y se veía cercano el empate. Pero en el tiempo agregado, Julián Quiñones persiguió un largo pelotazo. Solo contra el mundo. Cargado de fe. Le robó al primero. Superó con una finta al segundo. Así se deshizo de los últimos dos defensores. Enfiló solo rumbo al área. Oscar Ustari dudó. El colombiano definió con potencia. Las redes se movieron y el Jalisco explotó.

Fiesta absoluta, con cerveza volando por toda la tribuna. El 2-0 definitivo que sabe a bicampeonato. Atlas está muy cerca de la tercera estrella de toda su historia y segunda de forma consecutiva. Sólo 90 minutos le separan de la gloria. El próximo domingo, en la Vuelta, puede incluso perder por un gol y eso le bastaría para levantar la copa.

VÍA | TELÉFONO ROJO

Sé el primero en comentar

Déjanos un comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada.


*