Las principales naciones petroleras no lograron acordar el viernes recortes récord de producción en las conversaciones del G-20 para aumentar los precios, hundidos por la crisis del coronavirus, ya que Arabia Saudita se enfrentó con México a pesar de una oferta de mediación del presidente Donald Trump.
Arabia Saudita, Rusia y sus aliados, que conforman el grupo informal OPEP+, alcanzaron el jueves un pacto para reducir el bombeo de petróleo en una cantidad equivalente al 10% de los suministros mundiales, y dijeron que querían que otras naciones recortaran un 5% más.
Pero los esfuerzos para concluir el acuerdo chocaron con la postura de México, que dijo que solo reduciría la producción en una cuarta parte del monto exigido por la OPEP+.
Las medidas para frenar la propagación del coronavirus han secado la demanda de combustible para aviones y autos, tensando los presupuestos de las naciones productoras y golpeando a la industria del esquisto estadounidense, más vulnerable a los precios bajos del crudo por sus costos más altos.
Trump y su par ruso, Vladimir Putin, conversaron el viernes sobre el mercado energético, entre otros asuntos.
López Obrador dijo que a México se le había pedido un recorte inicial de 400,000 bpd, o el 23% de su producción actual, y que luego fue reducido a 350,000 bpd.
El mandatario, quien ha hecho del aumento de la producción de petróleo una de sus prioridades, dijo que Trump ofreció ayudar antes de que México anunciara que reduciría la producción en 100,000 bpd.
Via | Infobae
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