Rosy RAMALES
La amenaza al periódico Reforma de “volar” las instalaciones si no “corrige” su crítica en contra del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en sí misma puede representar una amenaza a las libertades de expresión y de imprenta en nuestro país, así como al derecho a la información.
Pero también puede representar una seria amenaza a la libertad política. Incluso, se ve como un desafío a la seguridad pública y a las mismas Fuerzas Armadas en momentos cuando se habla de militarizar el país.
Pero ¿en verdad viene del Cártel de Sinaloa? ¿O viene de algún fanático de la “Cuarta Transformación”? ¿O de una militante del ala radical de Morena?
Quien llamó al periódico Reforma se identificó como integrante del Cártel de Sinaloa, pero también dijo ser “diputado federal de Lozoya”. El individuo habría manifestado que todo este grupo criminal “está” con AMLO.
Imagínense. Generalmente los cómplices no se delatan. ¿O sí?
En este caso, más bien parece un intento de alguien en relacionar al presidente López Obrador con el Cártel de Sinaloa aprovechando el cuestionado saludo a la madre de “El Chapo” Guzmán, y antes, la puesta en libertad de su hijo Ovidio Guzmán.
Sin embargo, resulta algo extraño cuando hace algunos días en la prensa internacional se dio a conocer que el Gobierno de México habría congelado cuentas de Ovidio, así como de otras 300 personas vinculadas a dicho Cártel.
Lo único cierto hasta el momento es que hubo una llamada telefónica a Reforma, amenazando con volarlo si no cesan las “difamaciones en contra del mandatario. El hombre que llamó habría dicho: “Dígale que no esté difamando al Presidente de la República, que no esté traicionando a la Patria, porque, si no, las oficinas de ahí de su pinche periódico, así dígaselo, las vamos a volar“.
¿Es real el mensaje? ¿O es inventado por el mismo periódico?
¿Y la cita de no estar traicionando a la Patria, se tratará de un mensaje cifrado dirigido a un destinatario distinto a Reforma?
¿O todo es algo planeado para justificar las operaciones militares de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública en el país?
Despierta muchas conjeturas la amenaza.
Por ejemplo, también podría tratarse de la acción solitaria de algún militante del ala radical de Morena; uno de esos se la pasan hostigando a toda persona que disiente del ejercicio del gobierno de la “Cuarta Transformación”.
Qué riesgoso, sobre todo si la misma Cuarta “T” y el mismo partido solapa cualquier amenaza a las libertades y demás derechos humanos. Pues entonces, ¿cuál será del destino de un país como México cuya historia se ha escrito con sangre de defensores de libertades y derechos?
Según Reforma, por los datos registrados de la llamada, se detectó que se realizó de un teléfono de Mexicali, Baja California, estado gobernado por el morenista Jaime Bonilla, cuya ley que lo beneficiaba para prolongarle el mandato de dos a cinco años acaba de ser declarada inconstitucional por la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
¿La amenaza, tendrá que ver con un mensaje cifrado de algún bajacaliforniano resentido, aprovechando el desprecio del presidente López Obrador hacia el periódico Reforma?
A las autoridades competentes corresponde investigar las líneas sobre la amenaza, de la cual ya se deslindó el mandatario mexicano.
Investigar también la serie de atentados sufridos a diversas instalaciones de las ediciones de Reforma varias entidades del país y en distintos momentos. ¿Son hechos aislados o están relacionados con la amenaza de esta semana?
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Correo: rosyrama@hotmail.com
Rosy RAMALES
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