Andrés Manuel López Obrador abrió un nuevo pleito con el ex presidente Felipe Calderón, a quien acusó de hacer una transa de 120 millones de dólares en Sinaloa.
Con su autorización, dijo el tabasqueño, el Fondo Nacional de fomento al Turismo (Fonatur) compró el rancho Las Cabras, que fuera del ex gobernador Antonio Toledo Corro, supuestamente para hacer un complejo.
Pero el terreno se encuentra abandonado y el gobierno actual no sabe qué hacer con él, a ver cuánto se rescata del recurso público invertido ahí, porque “no tiene mucha viabilidad política”.
Dijo López Obrador:
“Fui a Mazatlán, en una gira, no sé si fueron ustedes también a un centro turístico, Isla Espíritu. Bueno, otra transa”.
Explicó después. sin aportar el nombre del rancho (Las Cabras) ni del propietario: Antonio Toledo Corro, ex mandatario de Sinaloa y ex secretario de la Reforma Agraria con José López Portillo:
“Compraron en Mazatlán en los límites de Sinaloa con Nayarit, un rancho de un ex gobernador -creo que finado, que merece todo nuestro respeto-; lo compraron en el gobierno de Calderón en 120 millones de dólares. Era el de Fonatur, el que luego fue secretario de Gobernación, un abogado”.
Se refería a Miguel Gómez Mont como titular de Fonatur y hermano del entonces secretario de Gobernación, el panista Fernando Gómez Mont.
Es un terreno sin gran futuro, según López Obrador:
“Porque no tiene mucha viabilidad para el desarrollo turístico, pero no les importaba eso, lo que les importó fue la compra del terreno, porque si fuese para fomentar el turismo hubiesen desarrollado de Mazatlán al aeropuerto y hacer el nuevo Mazatlán, que es lo que estamos pensando podría hacerse si logramos rescatar recursos de ese terreno abandonado que compraron”.
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