WASHINGTON.— La inflación en Estados Unidos se aceleró en agosto y se situó en 3.7 por ciento, informó la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos. Se trata de un dato clave para la próxima decisión de la Reserva Federal (Fed) de seguir subiendo la tasa de interés o tomarse una pausa.
Este es el segundo mes consecutivo que repuntan los precios a nivel interanual, tras una racha de más de un año de bajadas. En términos mensuales, los precios al consumidor en Estados Unidos subieron seis décimas con respecto a julio.
⇒ La tasa anual de la inflación subyacente, que mide la subida de precios sin contar ni la energía ni los alimentos, bajó cuatro décimas y se colocó en agosto en 4.3 por ciento. Sin embargo, mensualmente subió tres décimas en agosto.
En términos mensuales, la gasolina es el componente que más contribuyó al aumento de precios, con una subida del 10.6 por ciento, aunque en términos interanuales bajó 3.3 por ciento. También contribuyó al aumento mensual el avance continuo de los precios de la vivienda.
⇒ Hasta julio, cuando los precios volvieron a subir, la inflación estadunidense había bajado en términos interanuales durante 12 meses consecutivos desde que en junio de 2022 batiera su récord de los últimos 40 años al colocarse en el 9.1 por ciento.
Para tratar de controlar los precios, la Reserva Federal de Estados Unidos comenzó en marzo del año pasado a subir las tasas de interés y tras once subidas actualmente se sitúan en una horquilla del 5.25 y 5.5 por ciento, su máximo nivel desde 2001.
VÍA | TELÉFONO ROJO
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