Al celebrar el 102 aniversario de nuestra Carta Magna, el Magistrado Fernando Méndez Ortega, integrante de la Sala Constitucional del Tribunal Superior de Justicia del Estado, consideró propicia la ocasión para mencionar los beneficios que trajo la reforma realizada en materia de derechos humanos, en el mes de junio del año 2011.
En entrevista explicó que el artículo 1° Constitucional, señala en su párrafo tercero, que toda autoridad tiene la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos en el ámbito de sus competencias, “Tratándose de las y los jueces, deben garantizarlos aplicando la Constitución de manera directa y sin intermediarios. Tienen que ponderar principios constitucionales, convirtiéndose en aplicadores directos de la Constitución por excelencia”, dijo el Magistrado.
De igual modo, el especialista en derecho constitucional, indicó que dicho artículo, en su párrafo segundo, establece que las normas relativas a los derechos humanos se habrán de interpretar no solo conforme a la Constitución, sino también conforme a los Tratados Internacionales.
En este sentido, Méndez Ortega, agregó que al abarcar una mayor protección a las personas en sus derechos humanos, las y los Jueces del Poder Judicial de Oaxaca, observarán que éstos les sean respetados en todo momento al dictar sus determinaciones. “Uno de los casos que nos sirve de paradigma para reflexionar sobre lo que hemos expuesto; es, hablar del avance de juzgar con perspectiva de género, que implica hacer realidad el derecho de igualdad y combatir la discriminación por medio del quehacer jurisdiccional para garantizar el acceso a la justicia y remediar, en un caso concreto, situaciones asimétricas de poder”, dijo el jurista.
El destacado abogado, indicó que una de las prioridades de la Presidenta del Tribunal Superior de Justicia, es otorgar justicia en condiciones de igualdad, reconocer a la persona sus derechos y tutelarlos de manera adecuada, pues sólo así se puede aspirar a aplicar correctamente los principios de equidad, ya que a partir de la explicación de las diferencias especificas entre hombres y mujeres, se reconoce la forma en que unos y otras se enfrentan a una problemática concreta y los efectos diferenciados que producen las disposiciones legales y las prácticas institucionales.
Como datos informativos: del 100% de los trabajadores del Poder Judicial del Estado, 50% son hombres y 50% mujeres; En lo que respecta al Tribunal Superior de Justicia, 40% son hombres y 60% mujeres; el Consejo de la Judicatura se conforma de 45% hombres y 55% mujeres.
En lo que se refiere a los juzgados, hay 86 jueces y 70 juezas trabajando en favor de la ciudadanía.
Actualmente y después de 194 años, la titularidad del Poder Judicial del Estado, recae en una mujer, Magistrada María Eugenia Villanueva Abraján, quien abre una importante brecha para las mujeres oaxaqueñas en la función pública.
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