* Pamela Suárez, nutrióloga del Polideportivo Venustiano Carranza, demuestra que nutrirse bien es totalmente divertido y delicioso
Pamela Suárez Valverde es la encargada del área de Nutrición en el Polideportivo Venustiano Carranza. Su labor y propósito es apoyar a la comunidad a mejorar su salud y rendimiento a través de una alimentación sana que sea compatible con su estilo de vida.
Desde que comenzó a trabajar en el Polideportivo ha conocido a personas de todas las edades, quienes con su asesoría profesional avanzaron en su bienestar, confirmándole su convicción por el servicio público.
A sus 24 años, Pamela vive enamorada de su profesión, la cual le ofrece muchas satisfacciones y una perspectiva diferente de la vida sana.
“Decidí dedicarme a la nutrición cuando comencé a investigar sobre cómo cambiar mis hábitos alimenticios y cuidarme más, me adentré de tal forma que cursé la licenciatura y ahora estoy convencida que sí era por aquí mi camino”, asegura.
Durante el confinamiento decretado por la pandemia decidió realizar videos donde brinda recetas saludables a la población, coadyuvando a que sigan cuidando su alimentación desde sus hogares. A través de las redes sociales institucionales, Pamela demuestra que nutrirse es totalmente divertido y delicioso.
“La mayoría de las personas asocian comer bien con comer aburrido, pero en estos videos les demuestro lo contrario. Comparto recetas donde les ayudo a convertir una comida normal en una comida saludable, hacemos snacks, pasta, todo con los ingredientes correctos”, explicó.
La grabación y edición de los videos que se publican de forma semanal también fueron un reto para la licenciada en Nutrición; sin embargo, gracias al apoyo de su mamá y hermano cumple con este propósito de forma exitosa. “Me ayudan muchísimo, por una parte con la sugerencia de recetas; pero sobre todo en la producción, grabando y editando, para que sean útiles a las personas”.
Como a la mayoría de la población, Pamela tuvo que adaptarse a la nueva rutina de estar confinada en casa; sin embargo, en poco tiempo logró adaptarse a estas nuevas circunstancias y se enfocó en trabajar en algunos objetivos que tenía pendientes. De esta manera pudo mejorar su condición física y desarrollo emocional, habilidades que le permitirán ayudar mejor a sus pacientes.
“Cuando tengo un nuevo paciente –agrega– hago un test para conocer el estilo de vida, peso, talla y les realizo una bioimpedancia, que sirve para conocer el porcentaje de agua, de grasa corporal, masa muscular y otros aspectos necesarios para la evaluación.
“Por eso ahora más que nunca, debemos entender que un nutriólogo o nutrióloga no es quien te prohíbe o limita la alimentación, si no que te ofrecerá alternativas alimenticias para lograr un mejor rendimiento en tu día a día, tener energía y mejorar tu desarrollo”.
Pamela Suárez tiene claros sus objetivos. Cuenta con un diplomado en Nutrición Deportiva, área en la que quiere especializarse, por lo que tiene entre sus planes estudiar una maestría y con ello, poder trabajar con atletas o incluso con equipos profesionales de diversas categorías.
La también amante de los animales encuentra en la lectura, el yoga y el ejercicio otra forma de pasar el tiempo, crecer como persona y adquirir mayor sabiduría.
Cada aspecto de su vida es fruto de la constancia y determinación por alcanzar un objetivo. Avanza en su desarrollo sin perder de vista los valores de la honestidad, el respeto y la solidaridad, ejes que sustentan sus decisiones.
“Para mí la solidaridad es fundamental –precisó– los problemas a los que más nos enfrentamos como sociedad son la falta de empatía, se nos facilita más juzgar que ayudar y es tiempo de ser diferetes y romper con todo lo que no nos sirve”.
Con esa visión planea seguir construyendo lazos con quienes la rodean, capacitándose para seguir apoyando a sus pacientes a lograr una salud plena. “Ante todo y ante la nueva normalidad, demostrar que una nueva actitud es otra forma de vivir saludable”, finalizó.
Sé el primero en comentar