El coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, propuso la desaparición del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) y la Comisión Reguladora de Energía (CRE), para formar el Instituto Nacional de Mercados y Competencia para el Bienestar (Inmecob).
Este instituto dentro del marco normativo del Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), tendría por objeto garantizar la libre competencia y concurrencia, así como prevenir y combatir los monopolios en los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión.
El Inmecob sería un órgano constitucional autónomo, dado que el T-MEC obliga a que el organismo regulador de telecomunicaciones sea independiente y no rinda cuentas a un proveedor de servicios públicos de telecomunicaciones. Otro de sus objetivos sería el desarrollo eficiente de la radiodifusión y las telecomunicaciones; asimismo, fomentará el desarrollo eficiente del sector energético y protegerá los intereses de los usuarios y propiciará una adecuada cobertura nacional.
En la exposición de motivos de su iniciativa, Monreal Ávila explicó que los sectores de las telecomunicaciones y la radiodifusión, así como el sector energético, comparten características: infraestructura de redes, externalidades, economías de escala, existencia de insumos esenciales, necesidad de acceso a instalaciones de operadores históricos, cadenas de producción complejas, complementariedad, compatibilidad y estándares y mercados de pocos competidores.
El Inmecob tendría atribuciones para garantizar la competencia y libre concurrencia en todos los sectores y mercados del país, la regulación, promoción y supervisión del uso, aprovechamiento y explotación del espectro radioeléctrico, las redes de telecomunicaciones y la prestación de los servicios de telecomunicaciones y radiodifusión, así como la emisión de la regulación necesaria en esos sectores. Promovería el fomento y desarrollo eficiente del sector energético, propiciaría la confiabilidad, estabilidad y seguridad en el suministro y la prestación de los servicios en dicho sector y también la generación de electricidad, los servicios públicos de transmisión y distribución eléctrica, la transmisión y distribución eléctrica que no forma parte del servicio público y la comercialización de electricidad.
Las facultades del nuevo instituto estarán destinadas a garantizar los derechos humanos contenidos en la Constitución, así como a fortalecer la competencia y libre concurrencia en los sectores mencionados, todo ello buscando como fin último incrementar el bienestar del pueblo de México.
Aseguró que tendría plena independencia en la implementación de su estructura orgánica y no estaría supeditado a ningún otro órgano del Estado, pero sí sujeto a un régimen de rendición de cuentas ante el Poder Legislativo.
AA
MILENIO
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