CIUDAD DE MÉXICO.- Con el “sí, protesto”, los recién designados consejeros electorales, Norma Irene de la Cruz Magaña, Carla Humphrey, José Martín Faz y Uuc-kib Espadas sellaron con broche su accidentado proceso de elección.
En la Cámara de Diputados se vio marcado por la pandemia por Covid 19, pero, al final, una mayoría arrasante los respaldó para ser parte del Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE)
En un evento inusual al realizarse de manera virtual debido a las medidas sanitarias por la pandemia, y donde sólo estuvieron de manera presencial tres de los cuatro nuevos consejeros, el presidente del INE y el secretario General, rindieron protesta ante el Consejo General para el período del 27 de julio de 2020 al 26 de julio de 2029.
El consejero presidente, Lorenzo Cordóva, destacó el consenso y la trasparencia que, dijo, en tiempos de aguda polarización política prevaleció durante todo el proceso de designación de los nuevos consejeros.
En ese sentido, afirmó que en la Cámara de Diputados volvió a prevalecer la política y se refrendó el respeto al andamiaje constitucional que le ha dado estabilidad y solidez a la democracia mexicana.
“Desde mi perspectiva, el respaldo de todas las fuerzas políticas representadas en el Congreso a este proceso, refleja un compromiso con la democracia y con la imparcialidad que debe revestir la organización y arbitraje de las elecciones.
“(…) Ha sido un proceso de selección transparente que garantizará que se sigan cumpliendo los principios constitucionales de la función electoral: certeza, legalidad, independencia, imparcialidad, objetividad y máxima publicidad”, apuntó.
El consejero presidente dio la bienvenida a los nuevos integrantes de la llamada herradura de la democracia, y les señaló que ahora serán parte de un órgano colegiado vigoroso, en el que la pluralidad enriquece las decisiones, donde, dijo, cada integrante vota en conciencia.
Enfatizó que, en una democracia las mayorías son dinámicas y hablar de consenso no implica unanimidad, ni mucho menos la uniformidad, y parafraseando a Kelsen, señaló que la esencia de la democracia es la tendencia hacia el acuerdo y el compromiso de las partes con ese acuerdo, a sabiendas que el mismo no encarna los intereses de una sola de las partes, por lo que, dejó en claro que el consejo no tiene dueños ni bloques.
“En este Consejo General no hay dueños ni bloques, sostener lo contrario es una falacia; hay diálogo, construcción de acuerdos y eso sí, mucho trabajo, pues el grado de especialización y la sofisticación de nuestros procesos electorales requiere de un compromiso permanente con la Institución”, enfatizó.
Córdova hizo un reconocimiento al Comité Técnico de Evaluación encargado de realizar el proceso de selección, así como a los coordinadores parlamentarios integrantes de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara de Diputados y su presidente, Mario Delgado, a quien le reconoció que haya privilegiado el consenso y el acuerdo sobre el mayoriteo.
Puntualizó:
“Mi reconocimiento va pues a los miembros de la Jucopo y en especial a su presidente, quien en todo momento privilegió el consenso y el acuerdo, sobre la imposición y el mayoriteo que siempre se presenta como una disruptiva tentación antipolítica.
“Lo aprobado por la Cámara de Diputados constituye un buen ejemplo de que, aún en un contexto de una aguda polarización política, hay órganos del Estado Mexicano decididos a cumplir plenamente con el marco constitucional privilegiando los acercamientos y las coincidencias, la razón, por encima de las posturas de parte, como la base y punto de partida para la recreación de la democracia”.
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