Hoy inicia en Roma, Italia, la décimo sexta cumbre de los líderes del Grupo del G20 y, por la importancia de los temas a tratar y el perfil de los asistentes, las expectativas son muy altas.
Y es que, tras casi dos años de la pandemia, será la primera vez que se reúnan en el principal foro de coordinación política, económica y financiera internacional, los jefes de Estado de Alemania, Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica, Turquía y la Unión Europea.
Este año los líderes que representan el 90 % del PIB global y los dos tercios de la población mundial, abordarán temas enfocadas a abatir el coronavirus y las medidas necesarias para una recuperación global tras la pandemia.
La Cumbre de Roma tiene gran relevancia debido a que será la antesala a la 26° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) que se llevará a cabo a partir del 1° de noviembre en Glasgow, Escocia.
En esta reunión los representantes del Grupo de los 20 países más ricos se comprometerán para tomar medidas urgentes para mantener el objetivo de limitar el calentamiento global a 1.5 grados centígrados, ya que actualmente, estos producen más de las tres cuartas partes de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, por lo que su papel es trascendental para afianzar la lucha contra el cambio climático.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, será la estrella de este encuentro dado que su compromiso en favor del medio ambiente es uno de los principales ejes desde que inició su gobierno lo que marcará una notable diferencia con su antecesor Donald Trump.
Para muestra basta mencionar que antes de viajar a Roma para la reunión del G20, Joe Biden se reunió de último minuto con el Congreso de su país para impulsar su amplio proyecto de ley económica y medioambiental de 1,85 billones de dólares.
Importante pues la ley determinaría el destino de su presidencia y el de su partido en el Congreso, y su éxito restauraría la posición de EU en la escena mundial.
Recordemos que este proyecto incluye 555.000 millones de dólares en incentivos, inversiones y créditos fiscales destinados a impulsar el despliegue de energías renovables como la solar y la eólica, así como una exención fiscal que entregará hasta 12.500 dólares a quienes compren un coche eléctrico. También contempla el despliegue de nuevos autobuses y camiones eléctricos, mejorar la infraestructura de las comunidades ante incendios forestales e inundaciones y emplear a 300.000 personas en un nuevo “cuerpo civil del clima”.
Por lo pronto, Biden inició su gira por Europa con una reunión con el papa Francisco, ayer en el Vaticano, con quien compartió posiciones sobre medio ambiente, pobreza y pandemia.
Además, discutieron estrategias sobre cómo trabajar juntos en iniciativas basadas en el respeto de la dignidad humana, incluida la eliminación de la pandemia de covid 19, la lucha contra el clima y la compasión con los pobres.
Vía | elsoldemexico
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