El paso del chapulín. 

Sergio Ricardo Hernández Mancilla * 

Twitter: @SergioRicardoHM 

– García Luna comparece hoy en EU. 

– Investigan a 5 más por feminicidio de Abril. 

– Aumentará 20% el salario mínimo. 

Esos eran algunos de los titulares en los principales diarios nacionales hace exactamente un año. 

No teníamos ni la menor idea de lo que vendría unos meses después. 

Hoy, con un mundo muy cambiado, mantenemos algo de la agenda de aquel 18 de diciembre del 2019. 

El show de García Luna continúa; ahora enfrentando el proceso de extradición después de que el gobierno mexicano lo solicitara formalmente hace un par de semanas. Se ha vuelto un símbolo de corrupción recurrente en los mensajes oficiales. 

Un años después, también tenemos a los salarios en las primeras planas, pues nuevamente es noticia que la Comisión Nacional de Salarios Mínimos aprobó un alza al salario mínimo, ahora por un 15%, con el voto en contra de las organizaciones empresariales que, acusan, afectaría aún más a millones de microempresas que ya están siendo lastimadas por la crisis. 

Y de los feminicidios, ni qué decir. Hace un año hablábamos de Abril, y hoy hablamos de Karen. Junto a ellas, otros miles de casos de mujeres y niñas de las que no se habla tanto pero duelen igual. La información oficial señala que hay más de 700 feminicidios siendo investigados, aunque el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio informa que el número de mujeres asesinadas en 2020 se acerca a los 3 mil. 

¿De qué estaremos hablando el 18 de diciembre del 2021? 

Aunque estamos acostumbrados a ver pronósticos económicos y políticos que nos permiten formarnos una idea de cómo se viene el futuro cercano, la información sobre qué pasará el próximo año es siempre incierta, y por supuesto que este año no es la excepción. Por el contrario, no me imagino un panorama más incierto que el actual. 

Lo que sabemos hasta ahora es que la vacuna para el Covid 19 ya está a la vuelta de la esquina y que hay un plan del gobierno federal para terminar de vacunar a todos los mexicanos para principios del 2022.

En lo económico, los analistas encuestados por el Banco de México pronostican un crecimiento de 3.54% para el país durante el 2021, aunque se estima que el PIB tendrá una contracción de alrededor del 9%. 

La CEPAL advierte que México será de una de las 5 economías latinoamericanas que registren caídas más agudas del PIB, por lo que pasarán varios años antes de recuperar los niveles previos a la pandemia. 

En la política exterior, habrá que ver cómo nos afecta la nueva relación con el gobierno de Joe Biden y Kamala Harris que entrará en funciones en la tercera semana del año. Nos queda esperar un poco para saber si ganará la política o el pragmatismo, y si la relación de ambos gobiernos en verdad se vio afectada por la “amistad” de AMLO con Trump y la negativa del primero por reconocer públicamente a Biden antes de tiempo. 

Ambos países tienen escenarios sumamente complejos los próximos meses y, aunque Estados Unidos tiene una recuperación estimada ligeramente mejor a la de México, es indudable que la coordinación entre ambos será indispensable para salir más rápido y mejor de la crisis. 

Y en lo político, tendremos las elecciones más grandes de la historia, y para dentro de 12 meses tendremos 15 gobernadores y gobernadoras diferentes a los actuales, casi 2 mil nuevos alcaldes y cerca de 20 mil nuevos funcionarios públicos electos (incluyendo a los que logren reelegirse). 

Si algo nos enseñó el Covid y la pandemia es que nada está escrito sobre piedra. En realidad no sabemos nada. 

Sobre la vacuna, existen enormes dudas sobre si el gobierno federal será capaz de realizar una jornada de vacunación de ese tamaño e importancia de manera eficiente y, además, sin darle un uso electoral. 

Por una parte contamos con un Estado grande y fuerte que debiera tener capacidad de operar eso y más, pero por otra, tenemos un sistema de salud débil y roto y un gobierno que ha demostrado una gran ineficiencia en el ejercicio de las políticas públicas. En lo electoral, ni hablar: es difícil pensar que el reto se asumirá sin sacarle provecho político, cuando tenemos un presidente que no ha dejado de estar en campaña nunca. 

También hay muchas dudas sobre el papel que tendrán los gobiernos estatales frente al exagerado centralismo administrativo que no les quiere dar chance comprar y distribuir vacunas. 

En lo económico, todo está estrechamente vinculado a la súper jornada de vacunación y las políticas de reactivación económicas que puedan o no efectuar el gobierno federal y los gobiernos estatales el próximo año, al crecimiento de Estados Unidos que estará estrenando presidente y a la relación entre ambos gobiernos, entre muchas otras cosas.

Y en lo político, aún me parece muy prematuro poder decir hacia dónde se va a inclinar la balanza. De aquí a junio muchas cosas pueden cambiar. Las elecciones del 2021 serán, para AMLO y su partido, una prueba de fuego, pues tendrán que demostrar que la aprobación del presidente equivale al interés de la ciudadanía para continuar con sus políticas y su proyecto. Para la oposición será la primera y última gran oportunidad de demostrar que la ciudadanía está más cerca de ellos que de MORENA, y será también su termómetro para empezar a tomar definiciones hacia la sucesión presidencial. 

¿Y para los ciudadanos? 

Quién sabe. Creo que en este momento todos tenemos más preguntas que respuestas. 

El paso del chapulín. 

Yo, por ahora, solo espero que el 18 de diciembre del 2021 pueda escribir: Felicidades, todo salió bien. 

(*) Politólogo y consultor político. Socio de El Instituto, Comunicación Estratégica. Desde hace 10 años ha asesorado a gobiernos, partidos y candidatos en América Latina.