El Zumbido del Moscardón
Alejandro Leyva Aguilar
El discurso anticorrupción de López en la sede de la Organización de las Naciones Unidas, mal leído por cierto, quedó opacado por la contundencia de los hechos en México. La pregunta que se hacen a nivel internacional es ¿amlo se cree sus mentiras?.
Dormía en Nueva York el insulso “presidente mexicano” así en minúsculas y entre comillas cuando se enteraba que en el aeropuerto de Guatemala, Paola Félix, una alta funcionaria del gobierno morenista de la Ciudad de México, fue retenida en el aeropuerto de aquel país porque pretendía transportar 35 mil dólares que no fueron declarados.
Resulta que la Secretaria (hoy depuesta de su cargo), viajó junto con otros encumbrados funcionarios de la transformación de cuarta, nada más y nada menos que a la boda del VERDUGO de los neoliberales Santiago Nieto, titular -hasta el lunes- de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) del peje.
Entre las 300 personas que asistieron se encuentran la Gobernadora de Campeche Layda Sansores, el ex gobernador de Sinaloa Quirino Ordaz, Josefina Vásquez Mota y la Ministra Yazmín Esquivel entre otros muchos amigos de la pareja que tuvieron que firmar un documento de “confidencialidad” para asistir a la fiesta y no divulgar fotografías.
LO QUE APRENDIMOS LOS MEXICANOS, ES QUE SI PUEDE HABER GOBIERNO RICO Y PUEBLO POBRE, aunque el gobierno del peje se de golpes de pecho. Santiago Nieto y Carla Humprey, ésta última Consejera del INE a propuesta del propio amlo, contrajeron matrimonio en el lujoso hotel Hotel Casa Santo Domingo de la ciudad Antigua Guatemala, propiedad de Saúl Reyes un conocido prestanombres de la familia del capo sinaloense Joaquín Guzmán Loera.
Solo falta que renuncie la Consejera del INE Carla Humprey porque Paola y Santiago ya fueron pasados por la guillotina obradorista, ¿acaso un funcionario tan cercano al poder no invitó a su jefe a celebrar con él, el día más importante de su vida?, por otro lado el nuevo titular de la UIF que por cierto, los sueldos y salarios de sus familiares en el gobierno nos cuestan a los mexicanos más de UN MILLÓN CIEN MIL PESOS AL MES, debe iniciar su gestión investigando el origen de esos 30 mil dñolares que los invitados de Nieto Castillo querían introducir al país de manera ilegal.
Excesos y corrupción enmarcan entonces la participación del peje en la cumbre de Seguridad de la ONU y por eso vimos a un “presidente” cabizbajo, temeroso, como niño regañado, como si no estuviese muy convencido de que su discurso es una realidad tangible en su administración. Habló de corrupción a pesar de los escándalos de Pío y Martín López Obrador, a pesar de Felipa Obrador, Zoé Robledo y Manuel Bartlett, a pesar de que el 90 por ciento del gasto del gobierno federal, se adjudica y no se licita.
Por otro lado, pronuncia un discurso en el que no habla de la seguridad como sinónimo de “control militar” y ¿qué es lo que hizo en México?… como en los regímenes totalitarios (Cuba, Venezuela, Nicaragua o Bolivia), amlo militarizó al país con la Guardia Nacional emanada en su totalidad del Ejército Mexicano y no me queda claro, si de lo mejor de esta institución.
Les cedió el control de aduanas, carreteras, puertos y aeropuertos del país donde el trasiego de droga es constante, por lo que los cárteles de la droga pareciera que han cobrado un nuevo auge en donde el país entero es de su propiedad (cobro de piso, secuestros y casi cien mil asesinatos en solo tres años).
¿Con que cara López habla de Seguridad y de anticorrupción?, me parece que es el colmo del cinismo, pero lo que no sabe el peje es que sus escuchas, los receptores de su discurso, no son sus chairos que todo le creen, sino personas que conocen del tema, que saben que en México ninguna de las garantías individuales ni colectivas está segura en un régimen totalitario.
Dormía amlo en Nueva York o intentaba dormir antes de enfrentarse al foro más importante de seguridad en el mundo y ya tenia el asunto de Santiago Nieto encima, pero además su “corcholata” Claudia Shienbaum y el líder de su partido morena Mario Delgado, disfrutaban de un exclusivo lugar con un precio de 50 mil pesos en el espectáculo de la Fórmula Uno.
¿Contradictorio el discurso de López?, me parece que fue más lejos. Su discurso fue el de un hipócrita, es decir el de alguien que finge cualidades y sentimientos contrarios a los que verdaderamente se sienten o experimentan.
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