Rosy RAMALES
Hace algunos días un cuadro de Morena sin ambages comentó percibir a un Andrés Manuel López Obrador a quien no le gustan los morenistas beligerantes; no, por lo menos ahora cuando ejerce la Presidencia de la República.
“Y si te das cuenta –dijo— tiene a cada morenista empoderado en un lugar determinado y hay a quiénes no ha llamado, ni llamará”.
Aquél cuadro de Morena parece tener razón.
Y en ese tenor, cabe preguntar: ¿En las entidades federativas donde en 2021 y 2022 habrá elecciones de gobernador serán militantes de Morena las personas que las encabecen candidaturas vía este partido político, ya sea que compita solo o en coalición?
Mmm…interesante. Ya en los comicios de 2018 y 2019 ex priistas contendieron por Morena, mediante la coalición “Juntos Haremos Historia”. En las primeras elecciones concurrentes sobre todo no importó el origen, sino la victoria; aunque fue fácil el triunfo de cualquiera gracias al efecto AMLO.
En 2021 se jugarán alrededor de 15 gubernaturas, entre éstas la de Guerreo, Michoacán, Querétaro, San Luis Potosí, Campeche, Sonora, Zacatecas, Baja California Sur, Chihuahua y Baja California (si acaso alguien mete al orden al rebelde de Jaime Bonilla).
Ya veremos cuántas candidaturas serán para morenistas orgánicos, cuántas para neo-morenistas y cuántas para externos impulsados por Morena ya sea como abanderados de este partido o por otro, pero dentro de su coalición que seguramente se llamará “Juntos Haremos Historia”.
Para entonces la ciudadanía todavía soportarán dicha denominación. En realidad, el año electivo está prácticamente en el umbral: Empieza a principios de septiembre próximo, salvo cambio de fecha en una reforma electoral venidera.
Y bueno, en 2022 también habrá elecciones de gobernador en algunas entidades del país, entre las cuales se encuentra Oaxaca, que es uno de los estados predilectos del AMLO; siempre lo ha sido, todas las veces que fue candidato a la Presidencia de México.
Oaxaca fue uno de los primeros bastiones de Andrés Manuel: De ser 100% priista la entidad mutó rapidísimo a lopezobradorista. Y mucho con la ayuda de priistas, que siguen militando en el PRI, pero que han abonado a las victorias de AMLO en este estado; en las elecciones presidenciales le dio más de un millón de votos.
Y bueno, en Oaxaca se medirá la política social e indigenista de su gobierno, porque es la entidad donde se localizan los tres municipios más pobres del país y porque 418 del total de 570 municipios se rigen electoralmente por el Sistema Normativo Indígena; o sea, la mayoría del territorio y de la población oaxaqueña es indígena.
El contexto viene a colación para preguntar: ¿Será de Morena el próximo gobernador de Oaxaca? Probablemente sí, considerando que AMLO tiene una alta aceptación en la entidad y, por ende, Morena; partido que nada valdría sin la presencia de Andrés Manuel.
Y miren, a sabiendas que los estudios demoscópicos varían momento a momento, con la debida reserva mencionaremos datos de una encuesta realizada por Consulta Mitofsky en ocasión de la elección interna del PRI nacional, pero que reflejan datos interesantes y ciertos, como los siguientes:
A la pregunta ¿Si el día de hoy fuera la elección a gobernador del estado de Oaxaca por cuál partido votaría usted?, Morena alcanza el 39.0%, el PRI el 8.0%, el PAN el 6.8%, el PRD el 2.0%, Movimiento Ciudadano (MC) el 0.8%, el PT el 0.5% y el PVEM el 0.3%, siendo éste el de la menor preferencia electoral.
A la pregunta “Si en las próximas elecciones para gobernador se dieran algunas alianzas, ¿por cuál partido o alianza de partidos votaría usted si las únicas alternativas para votar fueran…?”, una coalición Morena-PT-PVEM-MC ganaría de calle, pues registró una preferencia electoral de más del 50% frente a otros supuestos de coalición.
Y el 81.5% de las personas consultadas consideró que AMLO ayudará a Oaxaca, mientras el 74.5% al gobernador.
¿Qué tal? Si la tendencia continúa con tales porcentajes, Morena ni siquiera necesitaría coalición para ganar la gubernatura de Oaxaca. Aunque una coalición le daría mejores resultados.
Por algo el Presidente de México visita tan frecuentemente Oaxaca. ¿O no?
Hace un mes realizó dos giras de trabajo, y este fin de semana se cumplieron ocho días de una segunda visita en los últimos días. Ahora recorrió municipios de regiones afectadas por las lluvias generadas por la tormenta “Narda”, además en una materia muy ad hoc: Salud.
LOS PROSPECTOS
En fin, considerando lo dicho por el cuadro de Morena mencionado al principio de esta columna, cabe otra pregunta: ¿El candidato de Morena a la gubernatura oaxaqueña será orgánico, neo-morenista o externo? ¿O Morena irá en coalición con el PRI para impulsar un abanderado priista? ¿O con el PVEM para impulsar un candidato del Verde?
La pregunta sale a colación por la presencia de Luis Antonio Ramírez Pineda en la gira de este fin de semana del presidente López Obrador por la Mixteca oaxaqueña. ¿Lo andará placeando? Claro, en la gira participaron miembros del gabinete de salud, pues visitó hospitales rurales, sobre todo del IMSS, que es más a población abierta.
El ISSSTE es para los trabajadores del Estado. ¿Entonces la asistencia del Director General de esta institución? Quizá fue necesaria para los objetivos de la administración de AMLO. Amén de que la mixteca es la tierra natal del padre de Luis Antonio: Don Heladio Ramírez López, el mejor gobernador que ha tenido Oaxaca en los últimos seis sexenios.
Y bueno, al parecer también es la tierra natal de Luis Antonio, cuyo nombre últimamente se ha mencionado para la sucesión gubernamental, sobre todo desde cuando sorpresivamente apareció en el gabinete de AMLO…bueno, desde cuando los reporteros gráficos lo cacharon entrando a las oficinas del tabasqueño previo a asumir la Presidencia de México.
En ese entonces, Luis Antonio aún era diputado del PRI en el Congreso del Estado de Oaxaca. ¿Le haría trabajo a AMLO en la mixteca en el proceso electoral 2017-2018? Mmm…en realidad, quienes ahí tienen mucha presencia es su hermana Narcedalia y, por supuesto, don Heladio, sin menospreciar el trabajo que pudiera tener el hoy director del ISSSTE.
Narcedalia sí que sería una buena candidata a la gubernatura y una buena gobernadora, porque la distingue su sencillez y su sensibilidad social.
En fin, hay otros prospectos para la gubernatura de Oaxaca como el senador Raúl Bolaños Cacho Cué, del PVEM, aunque cuadro proveniente del PRI; muy cercano al gobernador Alejandro Murat Hinojosa, quien mantiene una excelente relación con el Presidente de México.
Raúl Bolaños también es cercano a Manuel Velasco Coello, de lazos muy estrechos y casi familiares con AMLO. Además, en el senado, el joven oaxaqueño ha hecho buena mancuerna con Ricardo Monreal Ávila.
Y, claro, un prospecto por Morena es el senador Salomón Jara Cruz, quien, por cierto, anda de pleito con una mitad de los morenistas oaxaqueños, quienes preferirían a Susana Harp o a un externo antes que a Salomón.
Interesante, ¿no?, máxime cuando a AMLO no le gustan los morenistas beligerantes, como bien observó el cuadro de Morena.
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Correo: rosyrama@hotmail.com
Rosy RAMALES
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