En Yucatán cerraron alrededor de 20 estancias infantiles afectando directamente a más de 200 niños y padres de familia que se encuentran en los municipios de Hoctún, Cacalchén, Muxupip y Kanasín.
Con el anuncio en la reducción del presupuesto para las estancias infantiles de todo el país y ante la incertidumbre sobre cómo serán destinados los recursos para el apoyo de las madres o padres que necesiten este servicio, el colectivo Agenda de las Mujeres para la Igualdad Sustantiva en Yucatán (AMISY) se pronunció en contra de esta medida.
En rueda de prensa donde participaron trabajadoras de diversas Estancias, pidieron se reconsidere esta medida.
La integrante del colectivo AMISY, Paula Pech Puc, encargada de una estancia en el fraccionamiento Chenkú, señaló que de tener que cerrar, los niños quedarían en una situación de vulnerabilidad por falta de atención y de cuidado. De igual manera, expresaron que el programa se creó con la finalidad de apoyar a la población con menor ingreso económico, por lo que, los que saldrían más perjudicados, serían cientos de familias.
Rebeca Lugo, directora de la estancia infantil “Von Glumer” señaló que las madres serían las principales afectadas.
“La situación que nosotros venimos a presentar, no es la falta de apoyo para nosotras, sino la preocupación que tenemos es que ese apoyo vaya destinado a lo que está propuesto que es la atención de los niños”, dijo.
En Yucatán existen un total de 204 estancias, que atiende a 8 mil 100 niños y emplea a 2 mil 130 asistentes educativos; no obstante, el colectivo señaló que las que puedan y tengan el recurso seguirán operando de forma particular, pero el subsidio para las madres se vería afectado.
Respectó a la propuesta del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, de otorgar ese dinero para pagar a los abuelos o familiares y que cuiden a los niños comentaron que no se garantiza los cuidados, ni suple las atenciones de los profesionales.
“Se verían afectados aquí padres de familia, porque al no tener servicios y cuidado y atención a los niños, los padres van a tener que ver quién les cuida sus pequeños; muchos van a tener que dejar de trabajar; las personas más afectadas serán las mismas asistentes educativas que pierden su trabajo y los niños que se quedan en lugares vulnerables”, señaló Rebeca Lugo, directora de la estancia infantil “Von Glumer”.
Con información de excélsior
Sé el primero en comentar