Colombia: Los Grandes Retos del Pacto Histórico

Por David Bencomo-Guerra

El 19 de junio atestiguamos la consolidación de un proceso político sin precedentes en suelo neogranadino. La victoria de la Fórmula Pétro- Marquez en la segunda vuelta por la presidencia de Colombia, supone entonces una suma más a lo que aquí hemos llamado “El Giro Progresista 2.0 en América Latina”. Y es que en términos reales, esto supone la consolidación de tres momentos históricos llevados adelante las últimas tres décadas, en primera, los acuerdos de paz firmados por la guerrilla del M19 con el gobierno de Virgilio Barco en el año de 1990. La firma de los acuerdos de paz entre el gobierno colombiano representado entonces por Juan Manuel Santos y la guerrilla de las FARC-EP y finalmente el estallido social suscitado entre abril y mayo de 2021 que tuvo su catalizador por el anuncio del proyecto de reforma tributaria propuesta por el gobierno de Iván Duque.

La primera vuelta electoral dejó en claro que las condiciones de aceptación y gobernabilidad por parte de una opción electoral derivada del Uribismo estaban descartadas, lo que hizo que una figura poco tradicional como la de Rodolfo Hernandez -ex Alcalde de Bucaramanga- lograra entrar en la carrera por el balotaje. Pero cuyas intenciones no fueron suficientes para contener el trayecto de Gustavo Pétro al palacio de Nariño. La figura de la ahora vicepresidenta electa Francia Marquez, mujer afro quien se reconoce como feminista y abogada, le sumo gran número de apoyos a la coalición sobretodo en las bases sociales por su activismo medioambiental, como defensora de derechos humanos, se transformo entonces en un fenómeno y un símbolo de las comunidades tradicionalmente marginadas en la política y en la sociedad colombiana y supo llevar adelante la campaña en la que “vivir sabroso” sea una realidad.

Entrando en materia, tres son los puntos importantes sobre los que se cierne la política interna del ahora nuevo gobierno de colombia, en primera la transformación del sistema de seguridad social y de salud del país, cuyas falencias fueron ampliamente retratadas en la crisis de salud resultado de la pandemia por COVID-19, y es que el modelo de las EPS ha sido ampliamente discutido a lo largo del proceso de campaña por parte del discurso del pacto histórico.

En segundo término, el tema que dinamitó el amplio rechazo hacia el gobierno de Duque, la reforma tributaria. Y es que en gran parte de su proyecto de transformación de la economía colombiana pasa por lograr concatenar impuestos progresivos a las clases más pudientes de la sociedad colombiana y así mismo disminuir de manera gradual la evasión fiscal por parte de las empresas que hacen vida en el escenario económico en Colombia.

Finalmente y no menos importante, uno de los principales ejes del discurso político del pacto histórico y de Gustavo Pétro como tal, es lo que se ha denominado la justicia ambiental, que es entonces un avance de proposiciones de desarrollo bajo un concepto sostenible, donde se deje de manera progresiva la dependencia del petróleo, el carbón y los combustibles fósiles, buscando un mayor ingreso al PIB del país por vías menos contaminantes y sustentables de cara al futuro.

No podemos dejar de mencionar el reto que supone para el gobierno de colombia, delimitar cómo va a ser la interacción con el gobierno de Joe Biden de cara al futuro, debido a la amplia presencia del eje militar estadounidense en ese país, principalmente por el plan colombia, las bases militares que están en funcionamiento y sobretodo por la declaración de socio estratégico extra OTAN, además (y esto en mayor importancia) como será el trato con el gobierno de Nicolas Maduro y principalmente la sociedad venezolana, en cuanto a temas de migración, fronteras y derechos, idea fuerza que ha estado sembrada en la opinión pública a lo largo y ancho de todo este proceso político.

A titulo personal, es necesario entonces recordar que en el devenir histórico de la hermana república, todos estos cambios sociales y políticos de carácter popular fueron frenados por fuerzas altamente conservadoras y violentas, que encontraron su asidero a lo largo de los años, en el asesinato de líderes sociales, en la guerra y el desplazamiento. Pero no hay que engañarse, todo era cuestión de tiempo y aquí me permito citar a Heráclito diciendo que: “lo único real, es el cambio”.

Sé el primero en comentar

Déjanos un comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada.


*