Las pugnas entre bandas del crimen organizado en la región de Minatitlán y Coatzacoalcos siguen, pese a los operativos ordenados por la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Veracruz, luego de la masacre de 13 personas el pasado Viernes Santo.
A iniciativa del empresariado de la zona sur del estado de Veracruz, los ciudadanos se han organizado para exigirle al presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, un alto a la violencia, durante su visita a ese municipio, programada la próxima semana.
La Fiscalía General del Estado informó que los hechos de violencia registrados en las últimas semanas son derivados de la lucha por el territorio que hay entre el cártel de Jalisco Nueva Generación y Los Zetas.
Después del asesinato de 13 personas, entre ellas un niño de un año de edad, durante la fiesta en la palapa “El Potro”, el imperante de esa guerra es la quema de vehículos.
El mismo 20 de abril, horas después del ataque, dos camionetas fueron encontradas en llamas en las cercanías del puente Coatzacoalcos II.
Las primeras indagatorias indican que esas unidades son las mismas que usaron delincuentes para perpetrar el ataque en Minatitlán.
El 24 de abril, de nuevo, desconocidos quemaron un corralón de autos denominado “Grúas Santa Fe”, ubicado en la carretera Cosoleacaque-Nuevo Teapa.
El siniestro fue provocado, según testigos, por personas que burlaron la seguridad que hay en esa ciudad tras la masacre del Viernes Santo, y prendieron las llamas que quemaron un autobús y dos cajas de tráiler.
De nuevo este 25 de abril, en Minatitlán, desconocidos prendieron fuego a un autobús del grupo musical G5, del empresario Adrián Quintanilla.
El nombre de esa persona apareció en mensajes anónimos, de redes sociales, acusándolo de estar relacionado con la masacre de la palapa “El Potro”.
Con Información de La Silla Rota
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