CRÓNICA POLÍTICA: Morena reglamenta la reelección y Madero forma parte de la imagen del gobierno…qué incongruencia ¿no?

 

Rosy RAMALES

En la reforma del miércoles, los diputados y diputadas federales no establecieron su reelección, ni se ampliaron el mandato vía la elección consecutiva; más bien, modificaron leyes secundarias para reglamentar esta figura.

La reelección o elección consecutiva fue establecida en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos por el legislador del 2014, cuando se hizo la última reforma político-electoral integral en nuestro país.

Entonces fue reformado el artículo 59 constitucional, cuyo texto vigente en su primera parte es el siguiente:

Los Senadores podrán ser electos hasta por dos periodos consecutivos y los Diputados al Congreso de la Unión hasta por cuatro periodos consecutivos…” (10-02-2014)

Claro, habría que leer con lupa la reforma realizada el miércoles pasado por los actuales diputados y diputadas de la Cámara Baja (particularmente los de la llamada “Cuarta Transformación” -Morena y aliados-) para saber los términos exactos de la reglamentación y demás modificaciones a las leyes secundarias electorales.

Pero hasta donde se ha hecho público por las vías institucionales de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, los periodos de la reelección o elección consecutiva son los mismos del artículo 59 constitucional establecidos en 2014: Senadores hasta por dos periodos y diputados hasta por cuatro periodos.

Evidentemente, esta reforma de por sí resultó abusiva desde su nacimiento en aquél entonces. Imagínense, los senadores y diputados federales ¡podrán durar en el cargo consecutivamente hasta 12 años; dos Legislaturas completitas! Y eso si se interpreta la aplicación de la elección consecutiva desde su primera elección.

Fue una reforma hecha por un Congreso de la Unión aun con predominancia priista. Y ahora, los grupos parlamentarios de Morena y aliados debieron eliminar la reelección o elección consecutiva en congruencia a su postulado de “cambio verdadero” y la llamada Cuarta “T” que encabezan.

Sin embargo, al reglamentar una figura jurídica que en realidad no tiende a la profesionalización de las y los legisladores, sino a controlar el Poder Legislativo están proyectando su ambición de perpetuarse en el poder, sobre todo ahora cuando Morena y aliados están desdibujándose en el ánimo ciudadano debido a la falta de capacidad para gobernar.

Y quien sabe si para las elecciones concurrentes del 2021 –las más grandes de la historia del país— se recuperen en la preferencia electoral vía el voto cautivo confeccionado mediante los programas sociales, los cuales, incluso, elevaron a rango constitucional.

En buena parte de la ciudadanía actualmente hay la percepción de que la Cuarta “T” está dando prioridad a su permanencia en el poder, que a temas realmente de envergadura como lo es la pandemia por el coronavirus.

Retomando: Acorde con su filosofía de “honestidad” y “combate a la corrupción”, las y los diputados federales morenistas en vez de reglamentar la reelección o elección consecutiva de legisladores, debieron eliminarla.

Corrupción no solamente es desviar dinero público.

Vaya, la Cuarta “T” debería ser congruente con el postulado de Francisco I. Madero, cuya imagen forma parte de la imagen institucional del Gobierno de la República encabezado por Andrés Manuel López Obrador: “Sufragio efectivo, no reelección”.

Un postulado que los llamados “protagonistas del cambio verdadero” deberían aplicar en todos los cargos de elección popular.

Sin embargo, han salvaguardado la reforma reeleccionista hecha en 2014. Critican harto a los “conservadores”, pero se benefician de las reformas realizadas por éstos.

Y los principales legisladores de oposición brillaron por su ausencia en la sesión del miércoles pretextando prevención por el coronavirus. Qué casualidad.

En fin, hay mucho qué decir de la reglamentación en comento, ya habrá ocasión. Falta ver la posición de la Cámara de Senadores, que no creemos se oponga porque son lo mismo.

Lo que sí, por el momento es harto criticable la modificación para volver a competir por el mismo cargo sin separarse de éste.

Una acción de lo más corrupta.

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Correo: rosyrama@hotmail.com

 

Rosy RAMALES

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